Todo lo que necesitas saber sobre el síndrome del túnel carpiano
Una de las consultas más frecuentes que solemos tener los especialistas en mano y muñeca es el relativo al síndrome del túnel carpiano.
De hecho, el síndrome del túnel carpiano es un conjunto de síntomas que sufre el paciente como consecuencia de un proceso compresivo a nivel del nervio mediano a su paso por la muñeca. En la muñeca hay una estructura anatómica que se denomina túnel del carpo. Podemos imaginarnos un túnel con la distribución en 180 grados superiores y 180 grados inferiores lo que tendríamos que los 180 grados inferiores son una pared ósea y los 180 grados superiores son una estructura ligamentosa (ligamento anular del carpo). Esta estructura ligamentosa es una estructura firme en donde van a insertarse estructuras musculares como es la eminencia tenar y la eminencia hipotenar, que es la musculatura que tenemos a nivel de la palma de la mano.
Es decir, es una zona estructuralmente potente y firme.
Pues sucede que con el uso habitual de la mano (movimientos repetitivos y/o de fuerza) el aumento del volumen de los tendones y/o de la musculatura junto con la pérdida de elasticidad del ligamento anular del carpo se pueden producir fenómenos compresivos.
¿Qué sucede para que aparezca el síndrome del túnel carpiano?
Si tenemos una pared que es hueso y otra pared que es ligamento y muy firme, en este túnel hay muchas estructuras que tienen que pasar y por ese aumento de volumen quedan comprimidas. Básicamente las estructuras que pasan son el nervio mediano y todos los tendones flexores de la mano, al realizar mucha actividad manual, el volumen de los tendones aumenta ocupando mucho más el espacio del túnel y el que acaba sufriendo es el nervio.
Hay un aumento de presión sobre el nervio mediano. Esto produce una sintomatología.
¿El nervio se puede inflamar?
Cuando se produce una compresión del nervio, en la zona proximal donde se produce la comprensión, se produce también un proceso inflamatorio en esa zona del nervio. Se junta el hambre y las ganas de comer. Es todo un proceso, no es solo la compresión, también se produce inflamación del nervio.
Sintomatología del síndrome del túnel carpiano
El paciente característicamente aqueja la sensación de adormecimiento del primero, segundo y tercer dedo de la mano, es decir, del pulgar, del índice y del corazón y, en ocasiones, parte del anular.
Generalmente esa sensación es de predominio nocturno ya que en ocasiones la mano queda posicionada debajo de la almohada o de la cabeza, colgando, angulada y esto hace que el nervio empeore el flujo nervioso. Ello provoca que incluso algunos pacientes se despiertan por la noche por esta clínica de adormecimiento o dolor y tengan que levantarse de la cama para agitar la mano en un intento de reactivar.
Otra sintomatología clásica es la sensación como de pinchazos o de dolor que va desde la muñeca incluso hasta el codo u hombro
También otra sintomatología es la sensación de pérdida de fuerza. No se trata de una pérdida de fuerza real, sino que se trata de una pérdida de fuerza debido a que el paciente no sabe si está haciendo fuerza con la mano porque pierde tacto o sensibilidad. Es como cuando se tiene la mano dormida que al coger un objeto no sabemos si estamos haciendo mucho fuerza o poca fuerza.
Lo comentado hasta el momento es la sintomatología clásica. Luego hay otros síntomas que acompañan como la sensación de descarga, sensación de incapacidad para abrir o cerrar la mano pero este punto ya tendría más que ver con el fenómeno irritativo de los tendones que pasan por el mismo túnel.
Por lo tanto, el diagnóstico es fundamentalmente clínico, es decir, lo que explica el paciente, cómo le sucede, cuándo le sucede, con qué mejora o empeora y con esas explicaciones ya tenemos que tener en el 99% de los casos, el diagnóstico claro..
Pruebas complementarias ante el síndrome del túnel carpiano
Como pruebas complementarias nos encontramos con la electromiografía. La electromiografía lo que nos indica es la calidad de ese nervio. Es decir, sirve para saber hasta qué punto el nervio está sufriendo o no está sufriendo y si se tiene operar con relativa premura.
Con el electromiograma nosotros dividimos la afectación del nervio en tres grados.
- Leve : Prácticamente nunca se opera y realizamos un tratamiento conservador y control rutinario
- Moderado : Depende de la clínica que presente el paciente y empezamos con un tratamiento conservador que puede incluir el uso de férulas, y realizamos controles de evolución
- Severo : Siempre se opera porque ello implica que anatómicamente, estructuralmente el nervio se está lesionando y ello implica que aunque operemos sino lo realizamos rápido puede que el nervio no se pueda recuperar totalmente.
En estos casos, si la afectación es alta, puede requerir posteriormente una transferencia nerviosa.
En definitiva, es muy importante un diagnóstico precoz ya que no es lo mismo una afectación leve con un mes de evolución que una compresión severa que lleve 3 años de evolución, las perspectivas de recuperación del nervio son mucho peores en el segundo caso.
El tratamiento conservador del síndrome del túnel carpiano
Del mismo modo que un diagnóstico precoz, un tratamiento ortopédico precoz es muy importante. El tratamiento conservador, además de implicar el enseñar al paciente las posturas más correctas, también puede representar el uso de una férula tipo muñequera para evitar angulaciones.
Las angulaciones que superan los 45 grados muchas veces comprimen el nervio y la corriente axonal(por donde transcurre el flujo eléctrico).
El tratamiento quirúrgico del síndrome del túnel carpiano
El tratamiento quirúrgico se reserva para casos severos o cuando la respuesta a un tratamiento conservador no es el esperado.
Es una cirugía que se realiza a nivel ambulatorio, es decir, el paciente no llega a ingresar.
Esta cirugía a veces se realiza por endoscopia, según el cirujano, y hay otros que lo hacen con mínima incisión (de 1 a 1,5 cm), siendo los resultados idénticos.
La anestesia es local más un poquito de sedación para que los pacientes estén tranquilos y a las tres o cuatro horas de la cirugía, los pacientes se van a sus casas.
¿En que consiste la cirugía del síndrome del túnel carpiano?
La cirugía consiste en despejar, convirtiendo lo que era un túnel en un canal el canal y eso lo hacemos es abrir el ligamento lunar del carpo , sin que ello afecte la funcionalidad del ligamento.
Es una cirugía agradecida para el paciente y para el cirujano. Tiene poca tasa de complicación. No obstante es una cirugía que debe ser realizada por un cirujano de la mano que conozca bien sus estructuras.
El postoperatorio de la cirugía del síndrome del túnel carpiano
El postoperatorio es muy llevadero para el paciente ya que no precisa de un tratamiento rehabilitador específico. En un principio sale de la cirugía con un vendaje compresivo movilizando los dedos desde el primer momento y lo que limitamos es la capacidad de prensión.
Es decir, les indicamos a los pacientes que pueden utilizar las manos pero que no realicen actividades que impliquen fuerza, durante el periodo de convalecencia que suele durar entre 4 a 6 semanas.
Complicaciones que pueden surgir en la patología del síndrome del túnel carpiano
Las complicaciones que podrían surgir son:
- la persistencia de la sintomatología a pesar de la cirugía. Ello implica que la liberación ha sido incompleta.
- la recidiva de sintomatología meses o años después, es decir, que el paciente tras la cirugía vuelve a tener clínica que puede ser debido a un componente cicatricial muy potente que vuelve a cerrar el canal.
- La lesión de alguna rama nerviosa de este nervio, ya sea de la rama sensitiva como de la rama motora.
El equipo de TRAUMAUNIT siempre estará a la vanguardia de todas las innovaciones y las últimas técnicas que surgen en nuestra especialidad para ofrecer la mejor atención médica a nuestros pacientes.
Si deseas más información sobre patologías de mano y muñeca o deseas concertar una primera visita, no dudes en contactar con nosotros.
Doctor Pau Lopez-Osornio.
Dr. Joaquín Casañas
Dr. Joaquín CasañasDr. Joaquín Casañas es un especialista destacado en cirugía ortopédica, traumatología, pero sobre todo en nervio periférico, plexo braquial y cirugía de la mano, de cuyas 3 especialidades atesora un gran prestigio internacional. Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Central de Barcelona en 1988, completó su formación como médico residente (MIR) en la Ciudad Sanitaria y Universitaria de Bellvitge. Cuenta con el Diplomado Europeo en Cirugía de la Mano desde el 2000. Ha trabajado en diversas instituciones, incluyendo el Hospital de Meritxell en Andorra y el Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona. Desde 1994, es médico adjunto en el servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología de la Ciudad Sanitaria y Universitaria de Bellvitge. Además de su práctica clínica, ha contribuido con numerosas publicaciones científicas y capítulos de libros en su campo. En la actualidad da conferencias en diferentes congresos internacionales en relación a sus principales especialidades, además de dirigir Traumaunit, la unidad de traumatología de Teknon en Barcelona.