Procedimientos
Cirugía del nervio periférico
La cirugía del nervio periférico es una cirugía que realizan pocos cirujanos, tanto en España como en Europa.
¿Qué es el nervio periférico?
El nervio periférico es la estructura que conecta el cerebro con los órganos periféricos de las extremidades y que controla la sensibilidad, la motricidad y el estado de los tegumentos (tejido orgánico que cubre el cuerpo) como son la piel o las uñas. Para que lo entendamos mejor, por ejemplo el hecho de tener una piel más o menos sensible, fina, o hidratada, es responsabilidad del nervio periférico.
Tenemos nervios periféricos en las costillas, en la cara, en las manos, en las piernas, en las cuerdas vocales, y en un largo etcétera de nuestro cuerpo.
¿Cuál es la función del nervio periférico?
El nervio perférico controla la vasodilatación y la vasoconstricción de los vasos, la sudoración, el estado de la grasa, el estado de los pelos, etc… la funcionalidad al fin y al cabo de una extremidad o de un órgano.
¿Qué implicaciones tiene un daño en el nervio periférico?
Cuando se produce un daño en un nervio periférico, la motricidad, la sensibilidad y el estado vegetativo pueden verse afectadas. Esto puede ocurrir por 2 motivos:
- porque tengamos un defecto de función - anestesia, hipoestesia (disminución de la sensibilidad) o parálisis-
- o bien por que tengamos un exceso de función; podemos padecer entonces lo que se conoce como dolor neuropático o bien podemos también sufrir una fasciculación de la musculatura; se trata de esos movimientos repetitivos que por si solos pueden realizar algunos músculos, son pequeñas e involuntarias contracciones musculares que manifiestan una falta de coordinación.
Todo ello como consecuencia de un problema cuyo origen se encuentra en el nervio periférico.
¿Qué es un dolor neuropático?
El dolor neuropático está ocasionado por una alteración del tronco nervioso, habitualmente una lesión o compresión y que produce un efecto altamente desagradable al paciente, al tacto o de forma espontánea.
¿Qué técnicas se utilizan para reparar los nervios periféricos?
Las técnicas para la reparación de los nervios periféricos deben ser muy precisas y muy meticulosas. Hablamos de técnicas de microcirugía.
En la reparación del nervio periférico podemos decir que Traumaunit es el único centro de España y de los pocos de Europa , que realiza esta cirugía con un neurólogo en quirófano, en untrabajo en equipo que o hace totalmente único y con unos resultados mejores a la media de estas cirugías, gracias al hecho de tener un abordaje multidisciplinario.
¿Por qué trabajamos con un neurólogo en quirófano en la cirugía del nervio periférico?
El nervio periférico no es más que un cable eléctrico, para explicarlo de forma sencilla, que recoge un potencial de acción que lo transmite a la musculatura para que la persona haga el movimiento, o que sirve también para que cuando toquemos algo nos llegue una onda al cerebro que entendemos como tacto.
Cuando operamos un nervio periférico lo hacemos con las técnicas mas avanzadas de microcirugía (microscopio, instrumental, etc…) y lo hacemos también con un neurólogo en quirófano que nos va midiendo , en qué parte este cable eléctrico tiene la alteración de la función, para poder identificar con extrema precisión en qué parte del nervio reside el problema.
Electromiografías para conseguir la excelencia en la cirugía del nervio periférico.
Nuestro neurólogo utiliza un aparato de electromiografías que mide a través de un registro gráfico la actividad eléctrica que se produce; al fin y al cabo son estudios de conducción nerviosa que nos dan exactamente la alteración de la función de un nervio en concreto.
A modo de ejemplo podemos explicar que si tenemos un cable de cobre con una funda de plástico, no podemos tener la certeza que ese cable de cobre esté alterado justo dónde la funda está mal.
Esa funda puede estar alterada en un segmento determinado pero a lo mejor por donde falla la transmisión de información es por la conexión del extremo de ese cable. No siempre el problema está donde puede parecer.
Nuestro “electricista” es el neurólogo que nos va midiendo “la zona dónde se pierde la corriente.”
En este sentido el equipo de Traumaunit es el único en España que trabaja codo con codo con un neurólogo en quirófano para reparar adecuadamente un nervio periférico.
Debido a esto nuestro equipo consigue resultados superiores a la media de los resultados de esta cirugía.
Todo lo expuesto anteriormente sirve tanto para un nervio cortado, comprimido, aplastado e incluso en casos de dolor neuropático de pacientes que no pueden mover la extremidad. Por ejemplo se da el caso de pacientes que no pueden poner un pie en el suelo porque tienen dolor cuando tocan con esa extremidad.
Incluso en pacientes diabéticos con dolor de los nervios se pueden beneficiar de estas cirugias
¿Cómo reparamos un nervio periférico?
Existen diferentes técnicas para la reparación de un nervio periférico. Antes existía sólo la posibilidad de coser el nervio con microcirugía pero hoy en día existe la posibilidad de hacer injertos nerviosos.
Injertos nerviosos en la cirugía del nervio periférico.
Hasta hace pocos años se extraía un nervio de la misma extremidad del paciente y se reconstruía el nervio recuperando su funcionalidad.
Ahora también existen soluciones que consisten en utilizar injertos congelados, injertos de cadáver (aloinjertos) que se utilizan para recuperar la funcionalidad de la zona afectada.
Existe también la posibilidad de utilizar transferencias nerviosas : de un nervio vecino que funcione correctamente “intentamos dar corriente” a un nervio afectado que no funciona de forma correcta. Para entenderlo, un nervio es como un cable eléctrico que tiene varios cablecillos por dentro; extraemos uno de estos cablecillos y realizamos una sutura al nervio cercano, el que ha perdido su funcionalidad. Cogemos uno de estos cablecillos, lo identificamos con nuestro neurólogo y lo transferimos a un nervio que no funciona, para recuperar su funcionalidad.
La reconexión de ese nuevo “terminal” se realiza haciendo una incisión dentro de “la funda del cable”.
En este sentido el Dr. Joaquin Casañas es consultor de empresas americanas como líder de opinión sobre cirugía de nervio periférico en Europa, para dar conferencias sobre este tema e impartir formación a otros especialistas de nervio periférico a nivel mundial.
Preguntas frecuentes sobre el nervio periférico.
¿El nervio periférico se puede reparar?
El nervio periférico se puede reparar aunque esté seccionado.
¿Se puede solucionar el dolor neuropático?
Sí, se puede solucionar el dolor neuropático con diferentes técnicas.
¿Se puede recuperar la movilidad de una extremidad, se puede arreglar la parálisis de una extremidad?
Sí, se puede arreglar la parálisis de una extremidad.
¿Se puede recuperar la sensibilidad de una extremidad?
Sí, se puede recuperar la sensibilidad de una extremidad.
¿La recuperación de una sensibilidad o movilidad puede ser completa?
¿Qué tiempo tengo para poderme operar con éxito?
Cuanto antes mejor. El nervio es como la raíz de un árbol que tiene la capacidad de brotar. Si cortamos una ramita puede brotar, pero si cortamos un árbol durante mucho tiempo sin aportar cuidados añadidos pierde la capacidad de brotar. Por tanto, cuanto antes operemos un nervio mejor.
¿Aunque deje mucho tiempo entre la cirugía y el síntoma se puede solucionar el problema?
Casi siempre sí, lo que ocurre es que el resultado no será tan bueno, de forma proporcional al tiempo transcurrido desde la lesión o mal función.
¿Cuáles son los síntomas del malfuncionamiento de un nervio periférico?
Los síntomas del mal funcionamiento de un nervio periférico son: No sensibilidad en la mano, anestesia, dolor, dolor de corriente, dolor de quemazón, dolor de presión.
A su vez el nervio periférico puede causar dolores proyectados como en el hombro, de la pierna en la rodilla, de la pierna a la cadera, de la pierna al pie, etc…
¿Puede un nervio periférico afectar a las cuerdas vocales?
Efectivamente un nervio periférico puede afectar al correcto funcionamiento de las cuerdas vocales. De hecho el nervio periférico conecta el cerebro con un órgano funcional, es lo que transmite a este órgano todas sus funcionalidades.
Hemos operado algunos casos de afectación de cuerdas vocales, tratando el nervio periférico y recuperando totalmente su funcionalidad en el habla.
Nervio periférico y mal funcionamientos faciales.
¿Puede la cirugía del nervio periférico solucionar el dolor facial del trigémino?
En algunos casos la cirugía del nervio periférico permite solucionar los problemas de dolor del trigémino. Este es uno de los dolores más aguidos e insoportables que puede sufrir un paciente.
¿La cirugía del nervio periférico puede solucionar una sección del nervio lingual?
En una ocasión operamos un paciente que se había seccionado la lengua, habiendo cortado en ese lance el nervio periférico lingual. Al sacar la lengua , la mitad quedaba atrófica. Con la cirugía del nervio periférico de la lengua, este paciente recuperó parte del gusto y de la sensibilidad, pudiendo además sacar la lengua de nuevo de forma normal.
Últimas aplicaciones de la cirugía del nervio periférico.
Nervio periférico y tumor de próstata.
Algunos hombres tienen patologías del nervio de la próstata, porque se han hecho prostectomías radicales (extirpaciones totales de la próstata y de algunos tejidos alrededor de ésta) debido a un cáncer. muy probablemente estos pacientes se quedarán sin erección y sin eyaculación.
Esto problema ocurre incluso trabajando con cirugía robótica. A veces el tumor invade zonas que los cirujanos deben extirpar masivamente llevándose inevitablemente nervios por delante. Por todo ello en la actualidad nos estamos planteando un estudio para intentar recuperar las erecciones a través de la re-implantación de un nuevo nervio periférico.
Nervio periférico, glándula tiroides y problema de cuerdas vocales.
También se da el caso de pacientes que tienen cáncer de tiroides, que en el momento de tener que extirpar la glándula tiroides, como el nervio hace un recorrido como en asa, muy habitualmente resulta inevitable la sección de ese nervio periférico. La consecuencia directa es quedarse afónico, con una voz muy característica que hemos podido escuchar en alguna ocasión.
Las cuerdas vocales son un músculo que recibe órdenes a través de ese nervio periférico muy precisamente, para que el aire salga de una determinada forma, y que junto con la posición de la lengua y la boca podamos emitir un sonido u otro. Hoy en día intentamos también reparar este nervio períférico para recuperar la funcionalidad total de las cuerdas vocales del paciente, tal y como las tenía antes de sufrir la extracción de la glándula tiroides.
Nervio periférico y traumatismos en la piel
En el caso de pacientes que tienen un traumatismo sobre la clavícula, debido a la presencia de nervios periféricos en el plexo cervical de la misma zona, pueden sentir dolor o falta de sensibilidad en la zona del tórax. De forma muy concreta esto es muy importante en mujeres, que por ello ven afectada su sensibilidad en la zona del tórax y por ende parte de su sexualidad.
Afectación del nervio periférico por biopsias de pequeños tumores.
Muchos pacientes con sospechas de linfoma (tumor maligno en los ganglios linfáticos), estando en ocasiones el ganglio pegado al nervio, a partir de la biopsia necesaria para diagnosticar la enfermedad, pueden sufrir una afección del nervio periférico.
Lamentablemente, al extraer el ganglio para analizar su anatomía patológica se puede cortar un nervio con suma facilidad. Este nervio periférico se repara y por tanto estos pacientes pueden recuperar totalmente, en la mayoría de los casos, la funcionalidad de ese nervio que ha sido seccionado.
Algunos síntomas que indican que podemos tener una afectación del nervio periférico y no lo sabemos.
Por desgracia existe un grandísimo número de pacientes que tienen algún nervio periférico afectado y no saben identificar el origen de su problema, sea de falta de sensibilidad, de dolor o de mal funcionamiento de una extremidad u órgano.
Se trata de pacientes que sufren un golpe, o pasan por una cirugía, o sin más empiezan a tener sensación de hormigueo, o personas que tienen sensación de déficit de fuerza, o personas que tienen sensación de torpeza en el movimiento de una mano, de un brazo, de un pie o de una pierna, o personas que tienen imposibilidad de realizar un gesto o movimiento, personas que tienen atrofia muscular (me noto este músculo más débil, me noto este músculo más atrofiado que otros), gente que tiene dolor, pacientes con sensación de quemazón.
Podrían confundirse algunos de estos síntomas con enfermedades neurodegenerativas, pero en estos casos se diagnostican adecuadamente para salir de dudas.
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